The House

Tonya perdió a su madre cuando tenía siete años y creció en un orfanato. Su mayor sueño siempre ha sido tener su propia familia y su propio hogar. Ahora tiene 35 años, está casada con Arkadiy Kostenko y viven con los parientes de él. Dedica todo su tiempo y energía a su marido intentando no darse cuenta de que ha perdido el interés por ella y el resto de la familia no siente más que fastidio hacia ella. Un día, Tonya conoce accidentalmente a Dmitriy Sergeevich, un anciano que necesita cuidados. Se compadece mucho de él, ya que Dmitriy Sergeevich está en malos términos con su hijo Gleb y se siente terriblemente solo. Tonya lo trata como al padre que nunca tuvo. Pero, de repente, Dmitriy Sergeevich muere. Un notario comunica a la afligida Tonya su testamento, que pondrá su vida patas arriba.