El tren se paró

Drama con matices socio-políticos en el que un ingeniero heroico –conductor de un tren- es capaz de salvar a los pasajeros de las lesiones o la muerte a costa de sacrificar su propia vida cuando su locomotora se bloquea. Un investigador y Malinin, un periodista, están involucrados en la historia del accidente, pero desde dos ángulos diferentes: el investigador quiere saber por qué ocurrió, el periodista quiere alabar el heroísmo del conductor muerto. Al final, el investigador descubre que la responsabilidad del desastre se encuentra en una serie de personas, funcionarios y otros, que cometieron errores importantes que acompañaron a una fatalidad. Estas personas están unidas tanto por el pecado como por intereses mutuamente compartidos, aun cuando su principal interés es no permitir que el investigador averigüe la verdad y así preservar el status quo. La pregunta clave aparece al final, ¿qué versión de los hechos verá la luz del día: la de investigador o la del periodista?