En defensa propia

Un grupo de matones puritanos quiere establecer unas "nuevas reglas" en la ciudad aprovechando que la policía de Halifax (Nueva Escocia, Canadá) está en huelga. Tratan de amedentrar a los gays y lesbianas de un bar, pero, por accidente, el dueño del establecimiento resulta muerto y el líder de la banda decide ejecutar a todos los testigos. Sin embargo, uno consigue escapar y se refugia en un aislado bloque de viviendas. Los jóvenes propietarios rehusan entregar al superviviente, con lo que la pandilla resuelve acabar con todos los residentes. Eso no será sencillo, ya que los jóvenes se atrincheran en su apartamento, montan trampas y se arman para defenderse. Todo esto conduce, inevitablemente, a más muerte y derramamiento de sangre