Fantasy Sentences (C)

Hace muchos años, las ciudades junto a los ríos sufrieron una epidemia. Las cosas empezaron a cambiar y no estaba claro si la transformación era un síntoma de la enfermedad o un modo para evitarla. El contagio no se dejó nada: animales, plantas, piedras, tierra, hombres, mujeres y niños, sus pensamientos, sueños y recuerdos. Un día una vieja señora me dijo que todos los recuerdos se transforman en árboles. Decía que ella podía oír a los árboles cantar: ser un cuerpo, ser cualquiera. Al término de la epidemia, las ciudades parecían las mismas, pero había que mirar bien para encontrar rastros de tiempos pasados. Si conseguimos oír lo que dicen los árboles, ¿qué escucharemos?