50 hombres muertos
Basado en una historia real. Martin McGartland (Sturgess) es un pequeño delincuente del Belfast de finales de los años 80 despreocupado por el trasfondo político de la lucha entre católicos y protestantes. La principal preocupación de McGartland es sobrevivir y hacer su vida más fácil a través de los constantes controles policiales. Sus circunstancias le hacen fácil objetivo para que un agente de los servicios de inteligencia (Ben Kingsley), le fuerce a proporcionar información sobre las actividades de la organización terrorista IRA. Pero su éxito como espía se convierte en su penitencia. Además de ponerse a si mismo en peligro de muerte, sus actividades amenazan a su familia. Desde entonces, y ya han pasado 20 años, McGartland tiene que vivir de forma clandestina para evitar el castigo del IRA que traicionó.