1919. Crónica del alba. 2ª Parte
En un marco de malestar político y decadencia social, evoluciona José Garcés (Miguel Molina), un adolescente de 15 años que va descubriendo las decepciones y también los placeres de la vida. La familia, arruinada, le deja solo, trabajando de mancebo en una botica, por donde desfilan los personajes más enigmáticos. Es también allí, en la oscura rebotica, donde Garcés descubre el amor sexual en los brazos de Isabelita (Cristina Marsillach), la hijastra de un misterioso y amenazante revolucionario, una criada para quien la "fidelidad no existe", y que ve en su amante la posibilidad de huir de su vida, ya marcada, donde acabaría de "puta en Barcelona". Entre su amor por Valentina, cada vez más difícil de cristalizar, y su pasión por Isabelita; entre su condición de hijo de burgueses y su inclinación por el submundo revolucionario de la época; entre su amistad por el lider de la sublevación y la imposibilidad de ser útil a la causa debido a su corta edad; entre su familia, cada vez más arruinada, y la de Valentina, cada día más rica. José Garcés llega a sentirse ahogado por la vida, atenazado por los conflictos, impotente ante el destino, que parece cerrarle todas las puertas.