Dark Touch
La historia arranca una tarde en plena zona rural con una casa aislada que se anima de pronto como por medio de un acto de locura: los objetos y los muebles se desatan contra sus habitantes. Niamh, de 11 años de edad, es la única superviviente de la sangrienta masacre, obra del mobiliario, donde sus padres y su hermanito murieron. La policía sospecha de una banda de asesinos vándalos e ignora el testimonio de Niamh, que denuncia la rabia mortífera de los objetos y de los lugares. Recogen a la niña de manera provisional Nat y Lucas, amigos de sus padres, que se esfuerzan por apaciguar su traumatismo rodeándole de amor y brindándole una vida y una escolaridad normales con la ayuda de una asistente social. Pero Niamh no encuentra sosiego, sino todo lo contrario: a su alrededor los signos del peligro siguen manifestándose y en los lugares por los que pasa permanece una violencia disimulada, que no tardará en desencadenarse de nuevo y producir nuevas matanzas y nuevas víctimas.