Die Rothausgasse

Mileda no conoce otra cosa que el burdel de la callejuela Rothaus en Viena, donde ha crecido. Cuando ella cumple los 17, un nuevo 'salón' es abierto por la señora Goldscheider, en el que empieza a trabajar como camarera. Su madre le pide en su lecho de muerte que haga cualquier cosa para huir de ese entorno miserable, pero todos los intentos fallan debido a los prejuicios de la sociedad en contra de una "chica de la Rothausgasse". Entonces Mileda se enamora de Gustel, lo que conduce a una ruptura entre Gustel y su padre, un jefe médico. Gustel y Mileda se van a vivir juntos. Pronto no son capaces de pagar el alquiler, y Gustel se separará de ella cuando reciba la ayuda de un pretendiente...