La policía acusa: el servicio secreto ejecuta

El comisario Solmi, de homicidios, descubre una conspiración para llevar a cabo un golpe de Estado. Junto con Sperli, jefe de los Servicios Secretos, y una amiga periodista experta en casos criminales, logra ponerse tras la pista de varias personas implicadas pero a causa de varios homicidios y fugas desaparecen pruebas importantes. Casualmente, cae en manos del comisario un mapa de un lugar de los Apeninos donde se adiestran los entrenamientos paramilitares. Atacan el campamento pero los conjurados han sido avisados por una de las personas que lleva el caso.