Gato negro, gato blanco

En un pequeño pueblo balcánico, dos clanes gitanos se enfrentan en una divertida y caótica historia llena de amor, música y enredos.

"Gato negro, gato blanco" es una película dirigida por Emir Kusturica que se desarrolla en un pequeño pueblo situado a orillas del río Danubio, en algún lugar de los Balcanes. El ambiente es pintoresco y caótico, con casas de colores vibrantes y calles estrechas llenas de personajes extravagantes.

La trama se centra en dos familias gitanas, los Matko y los Dadan, que se dedican a actividades ilegales como el contrabando y el robo. Matko es un padre de familia que se encuentra en apuros económicos y decide embarcarse en un arriesgado negocio de contrabando de gasolina. Sin embargo, las cosas no salen como él esperaba y termina endeudado con Dadan, un poderoso mafioso local.

La historia se complica aún más cuando Matko promete casar a su hijo Zare con la hermana de Dadan, Afrodita, como forma de saldar su deuda. Pero Zare está enamorado de Ida, una joven gitana de la que se ha enamorado perdidamente. A medida que se acerca la fecha de la boda, los personajes se ven envueltos en una serie de enredos y situaciones cómicas, donde el amor, la traición y la lealtad se entrelazan de manera caótica.

El escenario se llena de música gitana, bailes frenéticos y un sinfín de personajes excéntricos que dan vida a esta historia llena de humor y surrealismo. A medida que la trama avanza, el espectador se sumerge en un mundo de contrastes, donde la alegría y la tristeza, la vida y la muerte, se entrelazan en una danza caótica y fascinante.