Shiroh

Uno, que tenía la voz de Dios, pero no sabía cantar para el pueblo. Uno, que soltaba la voz de Dios, pero trató de guiar al pueblo. En 1637, en resistencia a los fuertes impuestos y la prohibición del cristianismo, cuando Iemitsu Tokugawa fue el tercer shogun de la dinastía Tokugawa. En ese momento, había dos hombres llamados Shiroh que sobrevivían a una ciudad diferente. Shiroh de Amakusa, quien protegía el tesoro dejado por su difunto padre en un barco comercial hundido. Sus canciones tenían algo milagroso para manipular la mente de la gente. Otro Tokisada Shiroh Masuda de Shimabara. Fue bendecido con poder místico desde su infancia, pero ha perdido su poder de hacer milagros provocado por un incidente. Un hombre con la voz de Dios, y un hombre esperando una voz de Dios. Cuando estos dos Shiroh se encuentran, los gritos de 37.000 personas se convierten en el cántico de Dios .